El tumbet mallorquín, ese “pisto” de verduras fritas, es una opción que se adapta a la temporada, aquí con espárragos trigueros, perfecta para ser el acompañamiento de unos dados de presa Joselito frita.
El pisto manchego - ¿qué nos decís si lo terminamos con un poco de longaniza y un huevo frito? - no es la única receta que busca aprovechar las verduras de temporada y es que si salimos de la mancha las opciones son de lo más variopintas.
En Cataluña tenemos la sanfaina, en La Rioja la menestra que es fantástica con unas lonchas de coppa o de jamón al terminar, en Murcia la alboronía y en Mallorca el tumbet.
Hablamos de una receta muy típica de la primavera y del verano que aprovecha los productos de la huerta de temporada haciéndolos fritos, aunque si queremos ahorrarnos este paso podemos hacerlos también en el horno a potencia máxima, así aligeramos un poco la grasa de la preparación global.
Al tumbet le hemos añadido, en esta ocasión, unos espárragos trigueros fritos y, siguiendo la tradición mallorquina, lo hemos coronado con unas piezas de presa rápidamente frita para que quede crujiente por fuera y tierna y jugosa por dentro.
Esta forma de cocinar la presa también sería perfecta para acompañarla de una caponata, para ponerla encima de una menestra o para acompañarla de unas coles salteadas. Nos serviría también emplear otro corte jugoso y de alta infiltración grasa como son el secreto o también la pluma, cortes de esos Happy Pig que danzan a sus anchas por las enormes dehesas de Joselito alimentándose únicamente de hierba y bellotas.
Una alimentación 100% natural, sin conservantes ni colorantes ni metales pesados, que se traslada directamente a nuestras recetas: un claro reflejo de la dieta equilibrada mediterránea. Al final, somos lo que comemos y es importantísimo dedicar tiempo a nuestra alimentación.
Podemos permitirnos perfectamente disfrutar de un tumbet frito como la tradición manda porque el secreto es una dieta equilibrada. Hablamos de grasas saludables que nos ayudan a muchísimas funciones de nuestro cuerpo, como la grasa de los cerdos Joselito.
Por supuesto, el tumbet aceptaría muchos más vegetales, todos los que tengamos a mano; convirtiéndose así en una receta perfecta de aprovechamiento de los restos. Por lo general no deberían faltar nunca las patatas fritas y tampoco los pimientos o la salsa de tomate.
Una salsa que, por cierto, siempre es muchísimo mejor si se elabora de forma casera con un chup chup lento, condimentándola ligeramente con un poco de cebolla y también una pizca de orégano. Esta salsa sí que podríamos también aliñarla de formas diferentes, incorporando un poco de calabaza o dándole un toque de barbacoa; ¿y si asáramos las verduras en las brasas? ¡Pues también!
1 presa Joselito
3 patatas medianas
2 dientes de ajo
1 calabacín
1 pimiento rojo
1 pimiento verde
1 berenjena
12 espárragos trigueros
300gr de tomate frito de calidad
orégano
abundante aceite de oliva virgen extra
sal y pimienta negra