Te proponemos una receta saludable, fácil, rápida, deliciosa y muy nutritiva: presa Joselito con coles de Bruselas salteadas. Se trata de una receta de nuestro menú semanal perfecta para cualquier momento del día y que consigue un balance estupendo entre todos los sabores de la misma. La presa es uno de los cortes más jugosos -dada su infiltración grasa- y es perfecta para salteados de este tipo, que resuelven platos del día a día en apenas 15 minutos.
Ahora que disponemos de ella durante todo el año porque Joselito ha empezado a comercializarla ultracongelada para que mantenga sus propiedades intactas durante todo el año, es fascinante poder incluirla en las recetas diarias de casa para lograr una dieta equilibrada en la que los Happy Pigs aportan los mejores nutrientes llegados desde la dehesa, sin conservantes ni metales pesados.
Esta receta no tiene más misterio que el de descongelar adecuadamente la presa Joselito durante las 24 horas previas en la nevera, clave para que se mantenga como si fuera fresca, y marinarla una vez troceada en una mezcla de soja, mirin, sake y azúcar que otorga a la carne un umami especial, además del que ya tiene.
Luego sólo habrá que saltearla a fuego muy fuerte para que caramelice bien por fuera en una sartén, quedando su interior tierno y jugoso, poco hecho. Así, mantendrá todo el sabor de los cerdos Joselito y esa ternura característica de la presa, un corte ideal para salteados y para la plancha también. A su lado, unas verduras que bien aliñadas y tratadas se convierten en las compañeras perfectas: coles de bruselas en su punto justo de cocción para luego ser también salteadas y doradas en la sartén, y también unas ramas de bimi. Ambas siempre las podríamos sustituir por brócoli, coliflor, judías verdes de temporada o calabacín, siguiendo siempre el mismo tratamiento.
Una vez terminada la receta y nuestra presa Joselito con coles de bruselas salteadas en el plato, sólo quedará (opcionalmente) agregar a la sartén donde hemos salteado todo, a fuego mínimo, un poco de la marinada de la carne y dejarla reducir hasta que quede una salsa densa y untuosa con la que regar ligeramente el plato. Por encima, un toque de polvo de chile picante y ácido para despertar las papilas gustativas. Y en 15 minutos tenéis la comida lista, no falla.
Poner la carne sobre las verduras y terminar con un poco de la salsa por encima.