Aunque normalmente la reconocemos con guisantes, alcachofas, judías verdes y zanahoria, la menestra de verduras es esa macedonia vegetal perfecta que se adapta a las verduras de cada estación. Así, podemos cambiar sus componentes de invierno a verano pero siempre con el toque final del Jamón, la Coppa o la Panceta Joselito.
Junto al pisto, el gazpacho y a la escalivada, la menestra es una de las recetas vegetales más populares de la gastronomía española, a la cual es muy común añadir un poco de jamón o panceta, y además tiene la particularidad de ir variando según la región y la temporada del año. Aunque una buena conserva puede sacarnos de muchos apuros, si algo tiene la menestra de verduras es que, además de ser muy saludable, puede hacerse durante todo el año con los vegetales que nos da la huerta cada temporada, y cuanto más frescos, mejor.
Cada tres meses y durante cuatro veces al año, podemos combinar las verduras como mejor nos apetezca. Y es que no hay una receta preestablecida, todas las verduras caben aquí siempre con una premisa: cada vegetal tiene un tiempo de cocción propio.
Una vez tengamos cocidas todas las verduras, podríamos hacer un sofrito y rehogarlas, también rebozar algunas incluso o, como en este caso, elaborar una crema. Añadir un par de lonchas de Jamón o Papada Joselito, 100% natural, sin conservantes ni colorantes, potenciará todo el conjunto. El calor del plato fundirá la grasa y aportará un plus de sabor y textura. Esta es, sin duda, una menestra de verduras pulcra, sin sofritos ni guisos ni fondos, tomando como protagonistas a las verduras en su máximo esplendor. Podríamos también, una vez cocidas trabajarlas en un sofrito con cebolla, pimentón, vino blanco o incluso almendras. Pero para un menú diario saludable y equilibrado, quizás esta propuesta sea mejor opción siendo la otra igual de válida y apetitosa para un día más de fiesta.