Vamos a partir desde la base. Que si no nos ponemos a construir y al final hacemos la casa por el tejado y las cosas no se entienden. Los nutrientes que todos conocemos, se distribuyen en 2 clases, los madronutrientes que son los que nos aportan energía en su mayoría (hidratos de carbono, grasas y proteínas) y los micronutrientes que no nos aportan energía y los necesitamos en nuestro cuerpo en pequeñas cantidades (y son las vitaminas y minerales).
Hecha esta aclaración, hoy nos vamos a centrar en los macros. En una alimentación “normal” o en una alimentación variada y equilibrada, los macros se distribuyen de la siguiente manera:
Hidratos de carbono 50%
Grasas 30%
Proteínas 20%
Ahora estarás pensando que eso es imposible, que de proteínas consumes muchísimo más al día que un 20% que no es nada. Estoy de acuerdo, pero date cuenta que los hidratos de carbono no son solo pasta, pizza y pan. Ese es un tipo de hidratos de carbono, pero hay muchísimos más. La fruta es también hidrato de carbono (mejor dicho, la fruta también contiene hidratos de carbono), y cuanto más madura más se convierte en otro tipo de hidrato de carbono (un plátano maduro por ejemplo transforma su fructosa en glucosa y llega a triplicar sus calorías). Eso significa que los HdC están en muchísimos alimentos.
Hubo una época que se pusieron muy de moda las dietas disociadas. Seguro que lo has escuchado en algún momento de tu vida. Este tipo de dietas lo que recomendaban era no mezclar los macronutrientes, es decir, las proteínas por un lado, los hidratos de carbono por otro y las grasas por otro. Tú imagínate qué jaleo. Jaleo porque no hay alimentos que nos proporcionen sólo y exclusivamente un único tipo de macronutriente al 100%. Seguro que el aceite de oliva virgen extra es 100% grasa (vamos a poner un 99% por no pillarme los dedos). En contraposición está el azúcar, que es evidente que nos aporta el 100% de hidratos de carbono.
Pero el común de los mortales, tendemos a consumir pescado (que tiene proteínas y grasas) o nos bebemos un vaso de leche que tiene los 3 tipos de macronutrientes con diferentes porcentajes en cuanto a lo que aportan. Es decir, no tiene sentido que sigamos este tipo de filosofía o de dieta…muy complicado para nuestra cabeza para estrujarnos que tipo de alimentos están “limpios” al 100% del resto de nutrientes.
Dicho esto, respondo al título del artículo, ¿pegan los hidratos de carbono y las proteínas? Un sí rotundo. Pegan y tienen que ir de la mano. Habrá alimentos que tengan más % de proteinas, respecto a los hidratos de carbono. Habrá alimentos que tengan proteínas y no hidratos de carbono. Pero lo que sí está claro que en un plato tiene que haber y coexistir la combinación de los 3 macronutrientes. Un plato de arroz con pollo, un lomo de salmón con patata asada o una ensalada con queso y frutos secos, es decir, lo mejor está en saberlos combinar.
Después de haberme puesto tan pesado con los macros, con los hidratos, y que si pegan o no, lo que queréis saber son esas recetas ricas para repicarlas en casa. Muchas veces cuando me pongo a hablar de las proteínas que si pegan con los hidratos de carbono, me siento como un estilista de la comida…como si hablase de que los cuadros y las rayas no pegan pero si tienes rollo en tu forma de vestir los puedes defender perfectamente. Pues algo así pero con la alimentación. ¡Ay madre, estilista de los cerditos!
Espagueti carbonara con papada Joselito- yo reconozco que no soy muy de pasta (prefiero la chuleta de Joselito jajaja), pero este plato creación de Clara es una auténtica fantasía. Daros cuenta que la papada se deshace con el simple calor de los espaguetis. Colocar esa papada por encima y que la propia grasa se vaya fundiendo con el resto del plato. Bueno, que de lo que tengo que hablar es de los hidratos de carbono (espaguetis) y de la proteína (papada) aunque en este caso tiene más bien grasa. Una buena combinación para un plato
Tortilla de patata con chorizo Joselito - aquí está escribiendo el más aficionado a la tortilla de patata. Pero soy muy clásico. Huevo, patata y punto. Ni cebolla ni otros ingredientes que puedan estorbar en el sabor de dicho plato tan mítico de nuestra cultura. Hasta que pruebas la de Clarita con el chorizo Joselito. El hidrato en este caso viene de la mano de la patata, y las proteínas del chorizo y el huevo. Y evidentemente también hay grasa, y no solo por el chorizo, que la yema del huevo tiene lo suyo
Risotto con burrata y salchichón Joselito - otro placer de plato para nuestro paladar. Además cuanto más caliente está el plato, más se funden el resto de ingredientes. En este caso la burrata, pero el salchichón exprime todo el sabor que aporta la grasa. Si no quieres tanto embutido, podemos optar por secreto, presa o pluma de Joselito, otra forma de hacer risotto con cualquiera de nuestras carnes.
Ensalada de patata con coppa - nuestra querida Clara le da al coco de las recetas que da gusto. Aquí la base viene de la mano de la patata. Le podemos añadir verduras por doquier (pegan mucho unos cherry, espárragos y un poco de canónigos). El toque de proteína lo da la coppa, un embutido que a mi me encanta y que a la gente no le da para más. Es como el cabecero del lomo, más graso y más sabroso…no sabéis lo que os perdéis.
Y con estas combinaciones del estilista de Joselito, os dejo buenas ideas que tienen una base muy fundamentada nutricionalmente hablando, así que no tengas miedo a la hora de combinar los macros. Además esto es como en la moda, quien no arriesga, no gana.