Roja, verde y blanca, esta ensalada fácil de preparar es la reina del verano en Italia. Te contamos cómo darle una vuelta para llevarla al mundo 2.0 con toda la magia del jamón Joselito.
La ensalada caprese es uno de los platos más famosos del verano italiano. Es fácil de hacer, sólo requiere ingredientes de primera calidad para ser realmente deliciosa y nos llevará automáticamente a la isla de Capri, la perla del golfo de Nápoles. En realidad, hablamos de una ensalada de orígenes humildes que, se cuenta, fue creada por primera vez gracias a un albañil que introdujo sus ingredientes dentro de un bocadillo haciendo homenaje a los colores de la bandera italiana. El plato debería estar conformado por tomates corazón de buey - un tomate irregular casi sin semillas que tiene mucho sabor - mozzarella de leche de búfala, algo de albahaca, orégano y un buen chorrete de aceite de oliva virgen extra. A partir de ahí, ¿quién se atreve a versionarla a su manera?
Los tomates son, por supuesto, clave en la mezcla pero no tendrán que ser obligatoriamente corazón de buey sino que podemos utilizar unos rosa bien sabrosos (siempre pelados previamente) o incluso algunos raf de categoría. La mozzarella podríamos sustituirla por toda la cremosidad de la burrata para ir un paso más allá y la albahaca estaría bien encontrarla a través de un pesto que ayude a servir de salsa. Si queremos ir todavía más allá es cuando nos encontramos con un poco de salmorejo en la combinación y el toque final del Jamón Joselito en lonchas recién cortadas. Algo de sal y si necesidad de pimienta negra, esta ensalada caprese logrará enamorar a todos con muy poco esfuerzo de preparación. Y más si tenemos el salmorejo y el pesto ya elaborados con antelación.
Otra opción aventurera sería inyectar una burrata con ese salmorejo del que hablamos o incluso con el pesto, que es un recurso muy visual. Y en vez de utilizar jamón para el toque final emplear sal o polvo de jamón por encima como condimento. También podríamos asar unos tomatitos cherry y que éstos sean los tomates de nuestra ensalada, disfrutados en frío una vez pasados por la nevera. Por supuesto, estos ingredientes podrán ir encima de una pizza (añadidos cuando ésta ya esté fuera del horno) o mezclarse en cualquier pasta que nos quiera saber a la preciosa isla de Capri. Como siempre, la elección del tomate, de la mozzarella y del aceite de oliva deberían seguir exactamente las mismas premisas que la del jamón Joselito: 100% natural, sin aditivos ni metales pesados. Buscando siempre la excelencia aún en los platos aparentemente más sencillos.