Cada 16 de octubre se celebra el día mundial de la alimentación. Concretamente desde 1979. Este año celebramos la 43ª edición, si nos ponemos así protocolarios.
Es una celebración promovida por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) con un único objetivo: reducir el hambre en el mundo. Eso concretamente está en la famosa Agenda 2030, donde tienen un claro propósito que es hambre cero.
Hechas las presentaciones de una parte y de otra, y que la meta principal de esto sea que desaparezca el hambre en el mundo (que no es poco), el tema escogido para celebrar el día en este año 2021 es Cultivar, nutrir y preservar juntos. Quizás en parte con la visión puesta en la sostenibilidad y en la preservación del planeta (parece que a día de hoy, todo gira en torno a ese tema).
El título de este año, “Cultivar, nutrir y preservar juntos”, está enfocado en apoyar y dar nuestro agradecimiento a los héroes de la alimentación de manera general. Desde agricultores y ganaderos a trabajadores de supermercados, pasando por cocineros e intermediarios encargados de que los alimentos lleguen de sus granjas a nuestras mesas en toda esta crisis pandémica, el maldito coronavirus (que este sí que no necesita presentación).
Según la FAO, aproximadamente casi 690 millones de personas sufren hambruna en todo el mundo, unos 10 millones más que en 2019, es decir, vamos para atrás como los cangrejos.
La pandemia del coronavirus no ha hecho más que aumentar esta cifra, ya no solo en los países donde la hambruna está con unas tasas muy elevadas, sino en países donde el problema del hambre estaba erradicado desde hacía años. Aquí, los propios políticos y las organizaciones tienen que ponerse manos a la obra para poder bajar estas cifras lo antes posible.
Por ello, este año la FAO hace un llamamiento a la solidaridad mundial, es decir, tú como usuario eres un granito de arena en esta playa y tienes que arrimar el hombro todo lo que puedas.
Este llamamiento se hace para ayudar a las poblaciones más vulnerables y contribuir a que los sistemas alimentarios sean más fuertes y robustos. También pretende fomentar una dieta saludable para todos (aquí es donde entro yo en acción para proponer una alimentación variada, moderada y equilibrada aparte de saludable), y también medios de vida dignos para todos esos trabajadores del sector de la alimentación, que son tantísimos que ni nos imaginamos. Dicho esto, lo mejor será ponernos en acción y llevar las cosas al plano práctico.
Aunque no te lo creas, puedes hacer mucho más de lo que piensas, además desde el ámbito en el que te encuentres. Es importante fomentar tanto en las escuelas como en nuestra propia casa y, de hecho, hay varias formas de apoyar las iniciativas de la FAO. Una serie de puntos sencillos que todos podemos llevar a cabo:
Estas pequeñas cosas son fáciles de llevar a cabo y no solo el día 16 de octubre. Es algo educacional, algo de patrones (como le digo a mis pacientes), es un cambio de hábitos que pillaremos pasados unos días. Ya sabes que el ser humano se adapta de manera fácil a los cambios, así que es el momento de cambiar para que nadie pase hambre.