Recién cortado y en un amplio plato el Jamón Joselito es sin duda el aperitivo perfecto pero a partir de él también nacen ideas originales y suculentas que todo el mundo quiere como picoteo.
Probablemente uno de los momentos cotidianos más extendidos en España es el del aperitivo. El aperitivo es parte de la cultura española, es un momento de conexión social alrededor de la comida que se ha extendido tanto que lo más normal antes de ir a comer es picar algo para ir abriendo el estómago, un piscolabis ligero y sabroso que no pese pero que sí apetezca, una situación en la que el jamón es el rey indiscutible aunque siempre va muy bien flanqueado por el lomo, el salchichón, el chorizo o la coppa de Joselito. No hay mejor aperitivo que un plato de jamón Joselito, eso es indudable, y a su alrededor suele aparecer siempre una caña fresquita bien tirada, un vermú o una copa de vino que si damos el do de pecho será un champagne o algo del marco de Jerez pero lo que está claro es que entre risas cómplices, brindis y las primeras charlas el ibérico suele estar siempre bien presente.
En una terraza, una barra, quizás incluso un poyete a las afueras de un local o esos barriles alrededor de los que se han fraguado históricamente algunos de los mejores aperitivos, este evento requiere su pausa y disfrute e incluso muchas veces puede declinar en una comida como tal. Nada más llegar la bebida es casi un deber la presencia de las aceitunas o de las patatas fritas a modo de chips aunque si las queremos encumbrar a los altares a las primeras podremos rellenarlas de unas láminas de jamón Joselito y sobre las segundas se agradecerá posar unos taquitos del mismo jamón para que al entrar en la boca el crujiente y lo salino se equilibren con la sedosidad y el dulzor final de ibérico.
Hay una infinidad de aperitivos con jamón entre los que se pueden encontrar un chupito de gazpacho de melocotón con crujiente de jamón, unos daditos de Sandía impregnada en soja con jamón o también unas navajas a la plancha terminadas con una emulsión de grasa de jamón pero yéndonos a ideas más tradicionales no podrían faltar las clásicas empanadillas en versión mini como las que preparan en Joselito’s Velázquez (cómo llegar) a partir de abanico pero en esta ocasión rellenas de un picadillo de jamón e higos y terminadas una vez frítas con unas lonchas de jamón por encima que potencien aún más el resultado. Las frescas ensaladas son siempre un acierto para aperitivos livianos que luego inviten a una comida más formal por lo que si se quiere optar por esta vía un poco de tomate, queso feta y jamón aliñados con orégano, balsámico y aceite de oliva nos dejaría un gran sabor de boca como también lo haría una ensalada sardinas ahumadas, jamón Joselito y pera.
La croqueta de jamón es tapa pero también aperitivo estrella y aunque le dejemos relegado el buñuelo le va a la zaga y en lugar de bacalao puede ser de un untuoso queso gouda o idiazábal aliñado con hierbas y terminarse por encima con unos daditos de Jamón Joselito. Hay incluso quienes deciden hacer del aperitivo una comida como Dios manda y convierten a los huevos rotos con patatas y jamón en un picoteo estrella que a todo el mundo siempre apetece. Aunque claro, con Jamón Joselito cualquier aperitivo es bueno.