Lejos de disfrutarlo en tablas y bocadillos, el salchichón Joselito permite muchas preparaciones culinarias creativas para triunfar.
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Origen del Salchichón Joselito
Elaborado con carne de los Happy Pigs Joselito de la más alta calidad y sazonado con una mezcla de especias de herencia familiar en la que la pimienta negra no puede faltar, el salchichón Joselito es una delicia que se presta a una variedad de usos en la cocina a pesar de que normalmente lo consumimos como aperitivo o en bocadillos. Su sabor intenso y su textura melosa gracias a la alta calidad de su grasa lo convierten en un ingrediente versátil que puede transformar cualquier plato de manera sorprendente.
Estas tres opciones abren muchas posibilidades. La primera, triturando el salchichón con un queso cremoso hasta hacer un untable de salchichón. Bien será perfecto para dipear en él sirviéndolo al lado de bastones de verduras crudos o de pan tostado de muchos formatos (finas láminas de carasatu italiano, focaccia recién horneada o incluso pan de pita) o para rellenar otras preparaciones. Se nos ocurren desde cruasanes rellenos de crema de salchichón hasta rollitos de tortilla con crema de salchichón. Además, esta crema es perfecta para convertirse en un aliño de pasta o de ensaladas.
La segunda opción es en barritas, un formato que cada uno puede cortar en casa o también puede adquirir así en Joselito’s Velázquez. Esas barritas son óptimas para hacer bollos preñaos como los de chorizo pero también para rellenar tortillas francesas. Para hacer la tortilla sólo habrá que batir con garra unos huevos bien frescos, si es posible de gallinas que corran solas por el campo y se alimenten de forma saludable, hasta el punto en el que empiecen a espumar.
Ahí se añadirá una pizca de sal y se calentará muy bien una sartén. Una vez humee, el fuego se bajará el mínimo, se esperará un poco y se incorporará entonces el aceite, que no debe humear por lo que el fuego debería haber bajado lo suficiente. Luego ya se incorporará el huevo, siempre a fuego mínimo, y se revolverá con ahínco en la sartén hasta hacer una crema. Se reposará para terminar, dejando que forme una película que lo debe tomar mucho color sino quedar más bien pálida. Será en ese momento en el que colocaremos la barrita de salchichón Joselito en el centro. Ahora, con la ayuda de una lengua pastelera o una espátula de silicona y un buen giro de muñeca, envolveremos la barrita formando la tortilla francesa. También las podríamos emplear, estas barritas de salchichón, para rellenar wraps o para introducirlas en pasteles salados.
Aunque aquí hemos visto recetas con el salchichón en cubos, como el arroz de salchichón y champiñones, la opción de utilizar el salchichón en rodajas laminado lo más fino posible y utilizado para hacer brochetas como una Gilda Joselito a partir de aguacate y pepinillo encurtido. Las posibilidades, en cambio, son las que nuestra imaginación nos permita porque podríamos incorporar también la clásica aceituna, un trozo de queso, coliflor encurtida, maíz encurtido o incluso un huevo de codorniz cocido. Un chorrito de aceite de oliva por encima lo convertirá en el bocado perfecto.
