Aunque en realidad el Jamón Joselito combine con muchos más ingredientes – con algunos incluso de manera mejor – estos son los 5 vegetales más típicos con los que cocinar con jamón.
La versatilidad del jamón en la cocina es simplemente maravillosa, y cuando hablamos del mejor jamón del mundo que además de ser 100% natural y saludable aporta a nuestros platos un sabor delicado, profundo y altamente gustoso todavía lo podemos afirmar más. En realidad, el jamón es un ingrediente que da muchísimo juego en la cocina pues sirve tanto como potenciador de sabor como manera de darle sentido y envolver un plato, generar un conjunto, y aunque personalmente crea que la mejor manera de disfrutar del jamón Joselito es recién cortado a mano por un cortador profesional – tarea compleja y altamente importante – a la temperatura adecuada también es cierto que encontrarlo en nuestros menús nos hará un poco, o mucho, más felices.
Se puede utilizar el jamón a través de su grasa con el aceite de jamón que aportará un sabor especial a cualquier receta, también como producto principal en torno al cual se conforme todo lo demás o como guarnición y contrapunto que es normalmente como lo encontramos en preparaciones donde los vegetales son los protagonistas.
¿Quién no ha comido nunca alcachofas o guisantes con jamón? Puede que sean dos de esos platos típicos de cada casa que nuestras abuelas o madres preparaban con frecuencia. Para ellos se pueden utilizar tanto los tacos de jamón – en Joselito’s Velázquez los podréis encontrar y tener siempre en la nevera es un acierto porque es un recurso fácil y rápido para darle gracia a cualquier cosa – como en lonchas enteras o posteriormente fileteadas en juliana para obtener virutas. Las alcachofas además podríais rellenarlas con un picadillo de jamón y terminar gratinándolas al horno con una salsa holandesa y a los guisantes no les vendría nada mal el aporte de un huevo frito donde la yema estalle y emulsione integrando ese salino inicial y dulzor final del retrogusto del jamón Joselito en la boca; faltará pan para mojar en la salsa.
Para rellenar son también ideales los champiñones de la misma manera que haríamos con las alcachofas aunque un revuelto de estas setas con cebolla y Joselito enamorará a cualquiera y sólo se tarda unos minutos en hacer teniendo un poco de pericia con no cuajar el huevo demasiado en la sartén para que quede sedoso y jugoso. Otra opción es darle a este jamón maravilloso el protagonismo que merece y elaborar una pizza, coca o focaccia con masa casera terminándola con una conjunción de tomate – otro vegetal que combina de maravilla con el jamón, sólo tenemos que remitirnos al clásico desayuno español de barrita con tomate y Jamón Joselito – champiñones y ya, fuera del horno, unas lascas de jamón Joselito y otras de parmesano, también gran amigo de este curado ibérico tan preciado. Podemos obtener del jamón, secándolo, un recurso espléndido para sustituir la sal con la del propio producto ya que triturándolo muy bien una vez seco será el condimento perfecto para terminar un hummus de guisante, una crema de champiñones o también un paté de espárragos que abrirán de maravilla cualquier comida igual que lo haría el clásico melón con jamón, una ensalada estival que en muchas mesas se adora pese a que los melocotones o las fresas son quizás incluso más amigos de la pata del cerdo.
Ahora que estamos en plena temporada de espárragos, tanto los verdes como los blancos se acompañan estupendamente con Joselito pues servirá el jamón o la paleta para envolverlos y asarlos como si de unos rollitos se tratase, aportando un gusto profundo e intenso a las verduras incluso después envolviéndolos en hojaldre por fuera o haciendo con la combinación una quiche o tarta salada, tan versátil como deliciosa. Se me ocurre también rellenar un espárrago blanco con una farsa del mejor jamón del mundo y terminar rebozándola y napándola con mahonesa casera, puede sonar a bomba pero les aseguramos que es la bomba más gourmet. Los pasteles de verduras resultan un acierto siempre que se quiera dejar preparada la comida con antelación y ya no sólo es una sugerencia uno de espárragos o de guisantes sino que encontrarse daditos de jamón dentro de él o cubrirlo tras salir del horno con unas lonchas de jamón ibérico de bellota puede ser el punto que todos necesitan para ensalzar un plato. Porque las verduras no son aburridas y mucho menos si se acompañan con el mejor jamón del mundo.