Da una vuelta de tuerca a las clásicas barbacoas con el mejor producto Joselito: una brocheta de presa y melocotón donde la intensidad de sabor de una carne libre de conservantes y colorantes, procedente de cerdos criados en libertad, combina a la perfección con el dulzor natural de una fruta de la que se termina la temporada.
Seguimos estirando todo lo posible este verano tan peculiar. Algunos van a la playa, otros al campo u otros prefieren quedarse disfrutando de la comodidad del sofá pero, sea como fuere, lo único que puede afirmarse con total rotundidad es que, en cualquier lugar, no ha faltado alguna barbacoa. Ya lo decía Georgie Dann: “Este domingo, con todos los amigos, hacemos nuestro ambiente y una linda barbacoa. ¡Cómo me gusta la barbecue!”. Es un clásico indiscutible de todas las vacaciones que gusta a todos. Mayores y jóvenes disfrutan de estos momentos de reunión donde la única preocupación que hay es la de aguantar vivas las brasas y disfrutar de la compañía y la comida.
Las barbacoas son una de esas comidas que, en función de la edad, varían los ingredientes. Como todo en la vida, cuanto mejor sea el producto, mejor será el resultado final. Por eso Joselito es la mejor opción para exprimir al máximo el verano. Tener materia prima Joselito a mano lo mismo te soluciona un picoteo o una cena de verano que te hacer quedar como un auténtico dueño y señor de las brasas en la mejor barbacoa (sobre todo ahora que se puede disponer de carne fresca todo el año, los intactos de Joselito).
Una pieza que normalmente es la gran desconocida de las barbacoas es la presa, continuación craneal del lomo, que suele colocarse en cuarto lugar después de los inestimables jamón, paleta y lomo. Además, al proceder de cerdos Joselitos, criados en libertad, alimentados de forma natural y con un exhaustivo control sanitario, lo mejor de todo es que se puede consumir poco hecha.
Y si no tienes barbacoa a mano, no te preocupes lo más mínimo: con la plancha a tope se sellará y quedará sabrosa, jugosa y perfecta. Puede consumirse tal cual, con un poco de sal por encima, o cortada en trozos gruesos (para que quede poco hecha y no se seque) y puesta en brocheta.
Si a esto se le añade unos melocotones, fruta en plena temporada, el acierto ya está 100% garantizado. El dulzor natural del melocotón realiza una simbiosis perfecta con la intensidad de sabor de la presa Joselito, libre de conservantes y colorantes, procedentes de la mejor cabaña ibérica.
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